ASCENSO FEMENINO
Columna: No hay peor astilla que la del mismo palo
Por: Rodrigo Molina.
Fernández Vial se transformó en el tercer equipo en descender a la división de Ascenso Femenino tras caer, en un duelo cargado de tensión y emocionalidad, ante Cobresal a través de la vía de los lanzamientos penales. Luego de haber finalizado entre las cuatro mejores en el año 2022, las malas decisiones dirigenciales y el más absoluto desinterés de parte de quienes manejan a la institución aurinegra, contribuyeron a este lamentable epílogo, jugar en la B Femenina en el año 2024.
Hualqui fue el escenario de esta definición cargada de nerviosismo e inquietud permanente. Ante un escaso número de espectadores, las vialinas salían al campo de juego con su mejor contingente, con un esquema inicial de 4-4-2, pero con el adelantamiento de Catherine Monsálvez a la zona de volantes, varió a un 3-5-2. Sus rivales, las Legionarias, proponían dos líneas de cuatro muy ordenadas para contener los sucesivos embates ofensivos que iban a tener las aurinegras en los 90 minutos, un sistema que no iba a variar a lo largo del partido, apostando por el contragolpe para tratar de vulnerar la estantería defendida por Sofía Calbucura.
Ya a los 10’ habría un gol anulado a Krystell Muñoz por posición de adelanto. Las Inmortales llevarían a cabo su tradicional juego desde las bandas hacia el centro, pero se encontrarían con una defensa muy cerrada, donde las centrales Anabel Guzmán y Daniela Muñoz impondrían toda su experiencia, e Ivette Campos le cerraría los espacios a Elisa Pérez haciendo uno de sus mejores partidos con la casaquilla cobresalina. A los 21’, la apuesta por el contragolpe casi le daría resultado a las dirigidas por la DT Mónica Ledezma, cuando un pase profundo pilla en solitario a Leslie García que dispara al primer palo, pero el balón salía levemente desviado.
A partir de los 25’, el ataque vialino comenzaría a ser cada vez más incisivo, emergiendo la gran figura de la portera legionaria Macarena Vergara. Era un partido especial para quien defendiese la casaquilla del Almirante por 10 temporadas, pero Vergara se transfomaría en la gran figura de esta infartante definición y en la protagonista de la misma. A los 28’ estaría sensacional para ir abajo y sacarle un disparo esquinado a Elisa Pérez, mientras que a los 36’ y 37’ le impediría a Viviana Torres dos oportunidades de gol claras, mientras que a los 39’ tendría que esforzarse para tapar, en dos tiempos, un disparo colocado de Martina Oses. Además, Macarena contaría con un poco de fortuna, ya que Guzmán casi comete un gol en contra con un cabezazo contra su portería que se fue muy cerca al córner. Finalizaba un primer tiempo con un Vial intenso y un Cobresal especulativo, pero inteligente y aplicado en cuanto a su disciplina táctica.
En el segundo lapso, Fernández Vial continuaría con su ímpetu ofensivo, pero poco a poco comenzaba a cae en la maraña defensiva de las cobresalinas, además de que comenzaba a decaer su fortaleza física. En vista de aquello, hubo un período en que comenzó a atacar vía juego aéreo, pero no podía contrarrestar la eficacia de la última línea visitante en aquel aspecto. Tampoco el DT Pedro Ulloa refrescó su oncena con cambios que le devolverían el vértigo y la velocidad cuando se advertía que jugadoras como Muñoz u Oses ya estaban agotadas.
Fernández Vial tuvo un segundo aire casi al llegar a los 75’, teniendo dos claras ocasiones de gol a través de un cabezazo de Vivi Torres que sacó Vergara al córner y un tiro libre de Elisa Pérez que se fue levemente desviado. Por contrapartida, Aracelly Tapia, en el único balón que le llegó con ventaja en todo el partido, desvió un disparo cruzado. A los 86’ llegaría la última ocasión clara de gol de las vialinas, cuando un disparo rasante de Elisa superaría a Vergara, pero la venezolana Guzmán la sacaría de la raya.
Finalizaría el partido, llegaría la definición a penales donde Cobresal fue más efectiva que sus rivales, adjudicándose la tanda por 3-4. Las puentealtinas se quedan en la Primera División Femenina para el 2024 y festejarían con mesura su logro. Fernández Vial, un año después de haber quedado en el cuarto lugar, se despediría de la máxima categoría en medio del pesar de su hinchada y de las lágrimas de sus futbolistas.
El descenso de Fernández Vial apunta al mismo cariz del que tuvieron tanto Deportes Puerto Montt como O’higgins. Es el fruto de la desidia y del desinterés de parte de quienes dirigen a las respectivas instituciones, los cuales percibieron a sus ramas femeninas como una corte de gastos y no como una inversión a futuro, desligándose de su importancia y de fortalecer a aquellas ramas, con una clara mentalidad amateur para un campeonato que marcha en vías de ser profesional. Es el fruto del despotenciamiento de sus planteles, de los problemas económicos y de las irresponsabilidades caracterizadas por el no cumplimiento de las necesidades más urgentes de sus jugadoras. Es el fruto de querer apostar por la conformación de planteles más austeros (mal llamados “regionales”). Recordemos que el Vial Femenino recién se organizó para esta temporada unos días antes de la primera fecha, disputando el primer partido ante Palestino con un solo entrenamiento.
La hinchada vialina tiene más que claro que este descenso no es culpa ni de las jugadoras ni del cuerpo técnico actual. Hay que sacarse el sombrero por las futbolistas que decidieron quedarse en el plantel, como la propia Elisa Pérez, Nicole Chávez, Krystell Muñoz, Dina Barría, Catherine Monsálvez o Martina Oses, o a aquellas que regresaron desde su retiro temporal, como Norma Castilla, Viviana Torres, Carla Márquez o Katherine Pedraza, ni a ninguna otra jugadora que haya vestido la casaquilla aurinegra. El descenso es culpa de quienes no quisieron valorar los logros ni la proyección deportiva sino que solo se interesaron en los flujos de caja. El descenso es de aquellos que apostaron por privilegiar al primer equipo masculino que estuvo lejos de lograr el retorno en cancha a la Primera B. El descenso es de aquellos que pusieron a un ignorante como Luis Ceballos a cargo del primer equipo femenino, no teniendo idea de la realidad del fútbol femenino. El descenso es de aquellos que no quisieron continuar con el proyecto de Antonio Zaracho y destruyeron un proyecto deportivo maravilloso. El descenso es de aquellos que ni se molestaron en cambiar el horario y el lugar de esta definición, que debió jugarse en Collao o en El Morro y a una hora que hubiese motivado a la hinchada vialina a llenar el recinto, no a la hora del desayuno.
El descenso de Fernández Vial es solo la consecuencia de una serie de nefastas decisiones, una cadena letal que, ojala y es mi temor personal, no culmine en el fin de la rama femenina del cuadro del Almirante.
Hace seis meses que vislumbrábamos, como sitio web, lo que podía suceder, y sucedió penosamente, en el día de hoy. A la hinchada vialina le invitamos, nuevamente, a leer esta columna:
Fotos gentileza Instagram Cobresal Femenino Oficial.
