Columna: Universidad de Chile Femenina, Campeonas con Justicia

Dominaron el Torneo 2021 de principio a fin. El proyecto de Carlos Véliz, iniciado en el 2020, se cristalizó de gran manera con la obtención del Campeonato de este año, el segundo en el palmarés femenino azul desde que se instauraron los Torneos Femeninos ANFP en el 2008. De manera invicta obtuvieron este gran logro, solo cediendo un par de empates ante el Palestino de Claudio Quintiliani y ante Audax Italiano. Con letras mayúsculas podemos decir, JUSTAS Y GRANDES CAMPEONAS.

Por Rodrigo Molina (@Rodmol7)

Con toda justicia, el título obtenido por la rama femenina de la Universidad de Chile es el fruto de la cristalización de un proyecto deportivo que apuntó desde el primer partido a situar a las azules en lo más alto del Fútbol Femenino Chileno. La misión no era fácil, era finalizar con la hegemonía de tres títulos consecutivos obtenidos por Santiago Morning y brindarle una alegría al pueblo azul en un 2021 muy aciago para la institución después de las bajísimas presentaciones y el mal rendimiento de su rama masculina.

Ya nuestra base de datos estadísticos nos brinda un análisis cuantitativo de lo que fue la campaña del cuadro azul femenino en este Torneo 2021. En un total de 19 partidos jugados, las azules obtuvieron lo siguiente:

Partidos Ganados: 17

Partidos Empatados: 2 (2-2 ante Palestino; 1-1 ante Audax)

Partidos Perdidos: 0 (Campaña Invicta)

Goles a Favor: 96

Goles en Contra: 4 (2 de Palestino, 1 de Audax, 1 de Colo-Colo)

Porcentaje de Rendimiento: 92,98%

Esto sintetiza que el proyecto futbolístico de las azules respondió a la inversión promovida por la dirigencia azul para potenciar a la rama femenina con tal de comenzar una nueva hegemonía en el balompié femenil de nuestro país, procurando que estos éxitos a nivel nacional se puedan proyectar en el futuro a nivel internacional con las futuras disputas de la Copa Libertadores Femenina, logro solo obtenido por Colo-Colo en el 2012. Con un gran cuerpo técnico, con profesionales de excelencia trabajando en las áreas física, médica y psicológica, y con un plantel pleno en figuras, la Universidad de Chile rompió una sequía de cinco años sin títulos y pudo situarse, este 08 de Diciembre, en lo más alto de nuestro Torneo Nacional.

Vamos al partido final.

Bajo un intenso calor en el Santa Laura, Azules y Bohemias comenzaban a disputar el partido definitorio a las 18:30 horas. En un comienzo, Santiago Morning se hacía del control de las acciones, buscando atacar desde el centro hacia las bandas, con Karen Araya manejando el mediocampo desde el centro, jugando a trazos largos y buscando sobre todo el desborde en velocidad por el flanco izquierdo, donde Yenny Acuña trataba de superar la marca de Monserrat González, y procurándose un par de ocasiones de peligro a través de una semi volea de Isi Hernández y un remate por sobre el travesaño de Rosario Balmaceda.

Sin embargo, este ímpetu inicial de las Chaguitas, poco a poco fue controlado por las azules. Con la paciencia que le otorga su sabiduría y conocimientos técnicos y tácticos, Carlos Véliz reordenó y adelantando las líneas del cuadro azul y haciéndose de la tenencia del balón. Poco a poco, la habilidad de Acuña en ataque comenzaba a ser neutralizada, mientras que Karen comenzaba a ser víctima de una marca escalonada, donde incluso tanto Yael Oviedo como Sonya Keefe se desdoblaban entre mediocampo y ofensiva para colaborar en labores de marca, presionando y anulando el juego largo de la conductora bohemia. Destacó el gran partido (a mi juicio, el mejor de la temporada) que jugó hoy Ana Gutiérrez. La ex colocolina le brindó equilibrio al juego azul y comandó las labores de contención para contrarrestar la creación de Araya en el Chago, quien ya no podía maniobrar el mediocampo a su gusto.

Ya a partir de los 20’ la U Femenina comenzaba a llegar con peligro a la estantería defendida por Bórquez. Keefe y Oviedo abrían flancos en la defensa bohemia, Rebeca Fernández causaba estragos con su endemoniada velocidad, mientras que Bárbara Sánchez ganaba las diagonales, sobre todo por la banda izquierda. Un remate de Oviedo, a los 22’, exigió a Bórquez a mandar el balón al córner, y los tiros de esquina comenzaban a sumarse en el área bohemia. El Morning, al perder la tenencia del balón, apostaba al contragolpe y a algún pelotazo profundo de Karen para Acuña, quien a los 30’ remató levemente desviado ante el achique de Nati Campos.

Ya en la media hora del primer tiempo, el juego comenzó a desarrollarse bajo una alta intensidad a pesar del calor reinante. Sin embargo, la administración del mismo ya caía en manos de las azules, y el plan de juego de Carlos Véliz comenzaba a cristalizar sus ideas. Fue así que a los 39’, Bárbara Sánchez vuelve a ganar la diagonal por la izquierda, le gana las espaldas a Soruco y saca un derechazo que se cuela en el segundo palo ante la tibia reacción de Bórquez, quien solo atinó a mirar como el balón besaba las redes. Golazo de la Chama para la apertura de la cuenta, la Copa comenzaba a pintarse de azul, a pesar de que la U vistió de rosado en el viejo fortín de la comuna de Independencia. Finalizaba el primer tiempo con un cuadro azul manejando las acciones ante un, cada vez, nervioso cuadro bohemio que no encontraba una respuesta ante lo que sucedía en el Santa Laura.

El segundo tiempo comenzaba con un Chago Femenino empecinado en lograr el empate en los primeros minutos. La apuesta de María Pry era adelantar las líneas, ejercer presión a la defensiva azul y atacar en velocidad por las bandas. Las delanteras rotaron sus posiciones y Karen Araya adelantaba posiciones para darle más peso al ataque de las bohemias. Lo que pretendía Santiago Morning era aprovechar la velocidad de sus aleras y la proyección constante de sus laterales, sobre todo por el lado de Bárbara Muñoz. Sin embargo, la exigencia física que demandaba esta apuesta se contradecía con el desgaste experimentado en el primer tiempo. A las bohemias les faltaba fuelle, y a eso se agregaba que Véliz, de inmediato, volvió a reordenar sus líneas y achicó el campo de juego entre mediocampo y defensa, dejando libres en ofensiva a Sánchez y Fernández. Justamente, a los 56’, uno de los pocos pases profundos de Paloma López encontró destapada a la Chama Sánchez, quien elude con facilidad a Bórquez, quien se ve obligada a cometer penal. Tres minutos más tarde, la Profe Ana Gutiérrez ejecutaba con remate bajo el penal y sentenciaba, literalmente, la conquista del título por parte de las azules.

El Chago Femenino insinuaba una reacción con los ingresos de Rocío Soto, Geraldine Leyton y Valentina Navarrete, en procura de un desdoblamiento en ofensiva permanente por parte de las laterales y mayor claridad en la creación de juego. Mayor presión por las bandas y poniendo una línea de tres defensoras, le permitió a las bohemias hacerse del control del juego y hacer retroceder a la última línea azul. La iquiqueña Acuña se procuró dos ocasiones claras de gol, con un cabezazo al primer palo (64’) y un remate a quemarropa (67’), sin embargo, encontró gran respuesta en Campos quien salvó su portería de gran manera. Sin embargo, con el correr de los minutos, las Chaguitas comenzaban a ahogarse en su desesperación, en su falta de fondo físico y en su carencia de ideas para responder, en forma individual o colectiva, a la necesidad de acortar los caminos para dar vuelta la situación del partido. Salvo una jugada individual de Navarrete, a los 83’, los ataques bohemios se ahogaron en centros al primer palo que encontraron positiva respuesta en las manos seguras de Campos. Así culminaba el compromiso con el triunfo azul y la conquista del ansiado título después de 5 años.

¿Cuáles fueron los factores del triunfo de la Universidad de Chile Femenina?

– La lectura del partido por parte de Carlos Véliz fue eficaz en los momentos indicados. Logró contrarrestar el ímpetu inicial del Chago, reacomodó las líneas para encontrar respuesta positiva a la dinámica del juego y explotó la rotación y el desdoblamiento de funciones para facilitar la posesión del balón y anular las posibilidades ofensivas de su rival.

– Por su parte, María Pry nunca encontró una respuesta adecuada a las situaciones adversas que experimentó su equipo en los 90’, como la marca escalonada que anuló a Karen o el poco peso ofensivo por el centro del ataque. No se entiende que una jugadora experimentada como Luli Manicler solo haya tenido cinco minutos para cambiar la realidad del partido, y más encima que en la misma sustitución haya sacado a la jugadora más peligrosa del Chago como Yenny Acuña. Esto nos hace preguntarnos si fue acertada la salida de Marco Olea a mitad de temporada, ya que con Marco, el equipo había encontrado armonía en su funcionamiento, algo que con la DT española no pudo concretar.

– Fue el triunfo de lo colectivo por sobre lo individual. Hubo un equilibrio armonioso entre las distintas líneas de juego en el cuadro azul, con una defensa sólida y bien parada en zona, con un eje de contención encabezado por Ana Gutiérrez que contó con la colaboración laboriosa de sus compañeras para anular el excelso juego de Karen Araya, y una ofensiva con constante rotación, en donde destacó la figura de Bárbara Sánchez como la más destacada del encuentro. Un ejemplo de esta aseveración fue la labor de Paloma López en el campo de juego, dedicándose más a administrar el juego y a colaborar con sus compañeras en distintas labores.

– La ausencia de Daniela Pardo en Santiago Morning fue gravitante, ya que no hubo un equilibrio entre mediocampo y defensiva que era determinante si hubiese actuado la seleccionada nacional. Laura de la Torre y Coni Vázquez cumplieron una bajísima presentación, de un error suyo en la salida surgió el primer gol de las azules y no fueron gravitantes para permitirles a las bohemias dicho equilibrio. También la ausencia de Nicole Fajre fue notoria, ya que aporta quite, entrega rápida y remate de distancia, aspectos ausentes el día de hoy. Si lo comparamos con la ausencia de Carla Guerrero en la U Femenina, ésta fue adecuadamente suplida por una línea de cuatro bien armada, defendiendo en forma ordenada y en zona, comandada en forma eficaz por Fernanda Ramírez, de muy buena actuación.

– La preparación física del cuadro azul fue notable. Sus jugadoras pudieron resistir los 90’, bajo un calor inclemente, en medio de un juego de alta intensidad y de roce constante, lo cual facilitó la rotación y el desdoblamiento de funciones para una adecuada dinámica del juego. En cambio, las Chaguitas parecieron ahogarse en varios momentos del encuentro, lo cual las hizo retroceder en su ímpetu ofensivo y apostar por controlar el juego y por los pases largos, lo cual no les permitió asociarse en forma adecuada.

Ficha Técnica.

Estadio Santa Laura.

Público: 10.000 personas aproximadamente.

Estado del Campo: Aceptable.

Árbitra: María Belén Carvajal.

SANTIAGO MORNING (0): Gabriela Bórquez; Ámbar Soruco, Su Helen Galaz, Marcela Pérez, Bárbara Muñoz; Constanza Vázquez, Laura de la Torre, Karen Araya; Yenny Acuña, Isidora Hernández, Rosario Balmaceda. DT: María Pry.

Cambios: 61’ Rocío Soto x Pérez; 61’ Geraldine Leyton x Muñoz; 61’ Valentina Navarrete x Vázquez; 72’ Javiera Roa x Hernández; 85’ Ludmila Manicler x Acuña.

UNIVERSIDAD DE CHILE (2): Natalia Campos; Monserrat González, Fernanda Ramírez, Michelle Olivares, Fernanda Pinilla; Yael Oviedo, Ana Gutiérrez, Sonya Keefe, Yessenia López: Rebeca Fernández, Bárbara Sánchez. DT: Carlos Véliz.

Cambios: 90’ Karen Fuentes x Fernández.

Goles: 39’ Sánchez (UCH), 59’ Gutiérrez (UCH, penal).

Tarjetas Amarillas: 23’ Hernández (SM), 43’ Muñoz (SM), 43’ Oviedo (UCH), 46’ De la Torre (SM), 90’+2 Olivares (UCH).

La Figura del Partido: BÁRBARA SÁNCHEZ (UCH).

Fotos gentileza de:

@randomfutchile

@faundez_andy

@encanchacl